4.72% fue el indicador de cartera vencida a junio en Colombia. La cartera de consumo reporta una variación de 51.4% real anual

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  • Al cierre del semestre la cartera de consumo reporta una variación de 51.4% real anual, mientras el saldo riesgoso creció 39.1% real anual, siendo este uno los registros más altos desde agosto 2021.

Mercado de crédito

Según el último informe de actualidad del sistema financiero de la Superintendencia Financiera de Colombia con corte a junio 30 de 2023, los establecimientos de crédito (EC) aumentaron sus activos en $78.7b respecto a junio de 2022 y en $376.9b en los últimos 5 años. Por rubro, la variación anual de la cartera de créditos y operaciones de leasing fue de $51.7b, para las inversiones y operaciones con derivados $19.1b, mientras que las utilidades registraron una variación negativa de $5.3b.

Una de las mayores preocupaciones para el supervisor este año, es el deterioro de cartera , teniendo en cuenta que las finanzas de los hogares se han visto afectadas, por la baja dinámica de la actividad económica, la gran incertidumbre que genera al ambiente político, el deterioro del mercado laboral y los altos precios de todo tipo de bienes y servicios por los altos niveles de la inflación. Todo lo anterior a incrementado la carga financiera.  Ante esta situación se espera que el nuevo Superfinanciero no se demore en sacar medidas de choque como las que se sacaron en la Pandemia, para flexibilizar las condiciones de pago y alinearlas a la nueva situación financiera de los hogares, la que se espera que se comience a corregir en 2024.   

Como lo explica constantemente Asobancaria: "El poder adquisitivo de los colombianos se ha visto afectado por la inflación alta y persistente (11,8% a jul-23), y que ya completa 24 meses por fuera del rango meta del Banco de la República (BR). De hecho, por niveles de ingresos, los hogares pobres y vulnerables han sido los más perjudicados por el alto crecimiento de los precios".  Se estima que la inflación comience a bajar, al igual que las tasas de interés.  Sin embargo, recordemos que la banca en pleno, el  trimestre pasado, dio el paso , de manera autónoma de reducir tasas de interés de los créditos para reducir la carga financiera de los hogares."

En el caso particular de las empresas, en diferentes sectores se evidencian presiones sobre sus márgenes financieros y capacidad de pago, lo cual tendrá incidencia en la exposición al riesgo de crédito de las entidades vigiladas.

Para Asobancaria según lo detalla en su semanario Banca y Economía  "el contexto macrofinanciero actual evidencia una fuerte desaceleración en el crecimiento económico del país y un persistente elevado costo de vida. Esta situación tiene efectos negativos en las dinámicas de consumo de la economía y en la capacidad de pago de los hogares.  Esta situación adversa para los hogares ha representado los mayores niveles de vencimiento para la modalidad de consumo desde 2009. El mayor nivel de riesgo de los hogares también se ve reflejado en un incremento de las modificaciones y restructuraciones". Explica Jonathan Malagón presidente de Asobancaria que uno de las consecuencias de esta situación es que las entidades han venido aumentando las exigencias para otorgar créditos de consumo desde el año pasado, lo cual hace más lento  el avanzar en la inclusión financiera. "Se estima que alrededor de 2 millones de personas podrían quedar excluidas del crédito por cuenta de esta coyuntura, lo que desde luego sería contraproducente en medio de los esfuerzos del sector financiero y el Gobierno para otorgar créditos por primera vez a 1 millón de personas en el marco del financiamiento a la Economía Popular y Comunitaria".

Lo que si es cierto, es que el resultado de las elecciones de octubre de alcaldías y gobernaciones, será un punto de quiebre para la recuperación de la confianza en el país. Si la lectura es positiva, como todos esperan, el tejido empresarial reactivará de inmediato el empleo, se reactivaran los flujos de inversión y el consumo, principales motores de la economía.  Y por ende las fianzas de hogares y empresas comenzarán la senda de recuperación que todos esperan, lo que de inmediato impactará de manera positiva la calidad de cartera.  Por el contario, si la lectura de los resultados de las elecciones de octubre no es positivo,  vendrán una época de mayor deterioro de los indicadores económicos y por ende de los indicadores financieros, donde la cartera será una de las mayores afectadas.  Por fortuna la banca en Colombia exhibe unos de los mayores niveles de solvencia de la Región, estando preparada para afrontar pérdidas de cartera de  mayor mágnitud. 

Cartera total y operaciones de leasing financiero (incluido el Fondo Nacional del Ahorro)

Según el ultimo informe de la SFC, a junio de 2023 la cartera bruta continuó su desaceleración, explicada por el menor dinamismo de cartera a hogares (consumo y vivienda) y de la cartera comercial que no fue compensado por el crecimiento de la cartera de microcrédito.

En los últimos cinco años no se habían observado aportes negativos por parte de la cartera hogares y empresas a la cartera total como ocurrió al cierre de este primer semestre de 2023. En este mismo corte, la cartera a hogares aportó -2.2pp (4.5pp en junio de 2022) al total de la cartera, mientras que la cartera a empresas aportó -0.5pp (1.5pp en junio de 2022). En términos generales, la cartera a hogares y a empresas decreció 4.6% y 0.9%en términos reales anuales respectivamente. 

En cuento al saldo de provisiones, en términos reales anuales continúa decreciendo pero a velocidad menor con -0.6% al cierre del primer semestre de 2023 frente al -12.5% de junio de 2022. Las carteras de consumo y microcrédito reportan variaciones anuales positivas del saldo riesgoso con 39.10% y 7.03%, respectivamente. 

En línea con las expectativas del supervisor, en lo corrido del año varias entidades han decidido autónomamente hacer uso del mecanismo de desacumulación de las Provisiones Generales Adicionales (PGA) constituidas en el marco de la CE 026 de 2022. Es importante destacar que además de las PGA, los EC también pueden hacer uso de las provisiones contracíclicas, cuya desacumulación permite compensar el incremento en el gasto de provisiones en caso de la materialización del riesgo de crédito, limitando así la prociclicidad del sistema financiero (Carta Circular 019 de 2023);

Cabe recordar que el sistema de provisiones en Colombia establece que todos los créditos desde que nacen deben constituir un mínimo de provisión. Las provisiones corresponden a los recursos que destinan los EC para cubrir posibles pérdidas futuras y se reduzca el valor del activo ante la posibilidad de que un deudor o contraparte incumpla sus obligaciones crediticias.

Cartera de consumo

La cartera de Consumo representó el 31.1% de la cartera total (1.14pp menos que en junio de 2022 y similar a la participación promedio de los últimos cinco años), con un saldo de $211.9b. El impulso provino de productos como libre inversión con promedios de crecimiento real anual en el último año de 11.8%, tarjeta de crédito de 6.8%, vehículo con 2.4% y crédito rotativo 2.9%.

Respecto al crecimiento del saldo vencido, el mes abril alcanzó su máximo del último año,  a partir del cual se ha moderado y al cierre del semestre reporta una variación de 51.4% real anual por producto libre inversión en la totalidad de la cartera vencida de la modalidad con un 52.6% y le sigue tarjeta de crédito con 20%. La cartera con mora mayor a 30 días alcanzó $16b frente a los $9.4b de un año atrás, y el saldo riesgoso creció 39.1% real anual, siendo este uno los registros más altos desde agosto 2021.   

Sin duda el deterioro de la cartera de consumo es el mayor dolor de cabeza que tienen hoy las entidades crediticias, siendo los créditos de libre inversión los que más han entrado en mora, luego de varios años de acelerado crecimiento en las colocaciones, hoy se percibe un consumidor bastante endeudado.  Por su parte la gestión de cobranza se va a poner más complicada por la entrada en vigencia el próximo mes de la Ley 2300 que impone varias restricciones a la hora de contactar al deudor moroso para que atienda el pago. Por su parte, han sido, especialmente para personas de menores ingresos, son los que han presentado mayor tendencia de vencimiento, según datos de Asobancaria: "La dificultad de los hogares para pagar sus obligaciones podría generar reportes negativos en centrales de riesgo y, de no normalizarse la situación, esto podría traducirse en exclusión financiera"

Bajo el liderazgo de Jorge Castaño ex-superintendente anterior, la Superintendencia que previó un mayor deterioro de este portafolio, expidió el año pasado, la Circular Externa 026 de 2022, encaminada a limitar los incentivos de los EC a originar en plazos largos y elevar el apalancamiento de los hogares en un entorno de elevada inflación y tasas de interés al alza, con efectos heterogéneos según el nivel de carga financiera e ingreso disponible de los hogares.

Por su parte, la Asobancaria, junto con el Ministro de Hacienda y el presidente de la Andi han hecho un llamado al Banco de la República para que baje las tasas de interés, lo que produciría un alivio para todo el mercado de crédito. Recordemos que la subida de tasas por parte del Banco de la República, ha sido una medida eficaz para atacar la inflación.Nota: Es de advertir que la cartera vencida se refiere a cartera con vencimientos superiores a 30 días. Para efectos comparativos, se debe tener en cuenta que en la mayoría de países de la región la cartera vencida se mide a partir de los vencimientos mayores a 90 días.

Como resultado de la entrada en vigencia de estas instrucciones, las provisiones de la modalidad ascendieron a $19.7b ($13.3b al cierre de 2021) con lo que el indicador de cobertura por riesgo alcanzó 82.8% (93.1% a junio 2022). Las provisiones adicionales por CE026 sumaron a junio 2023 $662.1mm y por política interna $1.7b.

De forma consistente con el incremento de tasas de interés de política monetaria y una mayor percepción de riesgo, la tasa de interés de colocación promedio ponderada para consumo, sin tener en cuenta tarjetas de crédito, fue de 26.4% la última semana de junio de 2023 (18.4% última semana junio 2022). En el caso de tarjetas de crédito registró 26.1% (19.9% junio 2022).

Cartera comercial

Según datos de la SFC, esta  modalidad representa el 50.4% de la cartera total (51.3% promedio de los últimos 5 años), con un saldo bruto de $343.5b al cierre de junio 2023. El dinamismo provino del aporte de los segmentos financiero, empresarial y construcción, que crecieron en términos anuales reales 7.8%, 6.2% y 3.9%, respectivamente.

En el último año, el crecimiento de la cartera vencida  se aceleró y cerró el primer semestre de 2023 con un registro de 5.3%. El saldo con mora mayor a 30 días alcanzó $11.9b ($10.1b en junio 2022) y la cartera en riesgo retrocedió un 11.1% real anual. El saldo de las provisiones cerró en $17.2b, un crecimiento de -12.9%. El indicador de cobertura por riesgo alcanzó 59.2% (60.4% junio 2022). 

Al cierre del primer semestre de 2023 la tasa de interés promedio ponderada de los desembolsos del crédito comercial era de 22.5% frente al 17% de junio de 2022. El aumento de la tasa de interés refleja la estancia de política monetaria contractiva. Para esta modalidad cerca del 79.5% del portafolio está colocado a tasa variable (82.1% junio 2022).

Cartera de vivienda

El crédito para la financiación de vivienda representó el 16% de la cartera total (0.2pp más que el año pasado y similar al promedio de los últimos cinco años), con un saldo de $108.8b. En el primer semestre de 2023 el segmento de VIS pesos exhibió el mayor crecimiento real promedio del último año (9.7%), seguido de VIS UVR (2.5%), mientras que No VIS en UVR y No VIS pesos tuvieron crecimientos negativos en torno al 7.1% y 0.1% respectivamente. A junio el crecimiento real anual del portafolio en UVR fue negativo con -0.7% y el denominado en pesos -1.6%.

El saldo vencido presenta una tendencia al alza desde diciembre de 2022, y cerró junio de 2023 con $3.1b frente a los $2.8b de un año atrás, por su parte, la variación del saldo de la cartera en riesgo fue -0.5% real anual. Las provisiones ascendieron a $3.6b ($3.5b en junio 2022), un crecimiento real anual de 7.11%, con lo que el indicador de cobertura por riesgo alcanzó 59.5% (63.8% en junio 2022). El comportamiento de las provisiones refleja la aceleración de la vencida y la mayor percepción de riesgo en el segmento VIS UVR.

La tasa de interés para las colocaciones de vivienda VIS al cierre de junio fue de 16.3%, 6.5pp más que en el mismo período de 2022 (9.8%). Para el segmento No VIS la tasa fue 17.7% (+5.5pp). Cabe resaltar que en el portafolio de vivienda el 82.4% del saldo de la cartera está a tasa fija, incluyendo al FNA.

Microcrédito

Esta modalidad representa el 2.6% de la cartera total (igual al promedio histórico de los últimos cinco años), con un saldo bruto de $17.7b, manteniendo el dinamismo desde 2021, gracias al comportamiento de los segmentos menores o iguales a 25 SMMLV (4% real anual promedio año) que logró compensar la contracción del saldo para el segmento de 25-120 SMMLV del orden del -1.9% promedio real anual.

La estabilización del ritmo de contracción de la vencida culminó en marzo de 2023, a partir de abril los registros han sido positivos y cerró este primer semestre con un saldo de $1.2b frente a $932.7mm en junio de 2022 y una variación real anual de 13,72% (-17.05% un año atrás).

Las provisiones ascendieron a $1.1b ($965.7mm en junio 2022), esto es un crecimiento de 5.48%. El indicador de cobertura por riesgo alcanzó 59.2%, respectivamente. Sobresale la desaceleración en el rango de alturas de mora de 1-2 meses.

La tasa de interés de colocación para la modalidad de microcrédito se situó en 33.1%, lo que representó una reducción de 1pp frente a junio de 2022. En este portafolio cerca del 46.8% del saldo de la cartera se encuentra denominado a tasa variable.

CARGA FINANCIERA DE LOS HOGARES

Uno de los indicadores que anticipa alertas de posibles deterioros de cartera, es la  carga de servicio de la deuda, que se situó en el 36,2% a marzo del 2023. La carga de servicio de la deuda, calcula la relación promedio entre los pagos mensuales del préstamo y el ingreso mensual disponible de cada deudor, siendo este último el resultado de restar al ingreso total los aportes a salud y pensión y la retención en la fuente (Calculado por la Superintendencia Financiera).

Por su parte, la carga financiera total se ubicó en el 28,8% a marzo 2023, frente al 11,01% a marzo de 2022, la que se define como la deuda de los hogares sobre su ingreso disponible a un año, teniendo este último como fuente el DANE y definiéndose como el saldo que puede ser consumido sin la necesidad de reducir activos o incurrir en pasivos (Calculado por el Banco de la República).  Recuérdese que la  Libranzas, tarjetas de crédito y libre inversión representan el 86,6% del total de cartera de consumo. Por lo tanto son los productos que más endeudan a los colombianos.

Otro indicador que permite vislumbrar una mayor dificultad de los hogares para cumplir con sus obligaciones de consumo, y que ha venido aumentando desde el año pasado, es el indicador de vencimiento de las cosechas, que en su cifra más recientes presenta un deterioro más rápido frente a cosechas anteriores.

LA REESTRUCTURACIÓN VUELVE A PONERSE DE MODA  

Según lo evidencia Asobancaria,  estamos de nuevo ante un mayor nivel de modificaciones y reestructuraciones de clientes de cartera de consumo, que no se veía desde el año 2020 al iniciar la pandemia.  Explica Asobancaria que "tomando como muestra 16 entidades, que a mayo de 2023 acumulaban el 68% de los activos del sistema financiero y el 69% de la cartera de consumo, se evidencia que el número de modificaciones de créditos ha venido mostrando una tendencia creciente desde el cuarto trimestre de 2021  hasta superar los 100.000 clientes en el primer trimestre de este año. Esta cifra contrasta fuertemente con el periodo prepandemia, pues en el primer trimestre de 2019 tan solo se llegaba a 37.766 clientes".

Nota: Recordemos que de acuerdo con el subnumeral 2.3.2.2.1. de la Parte II del Capítulo XXXI de la Circular Básica Contable y Financiera, la entidad podrá modificar las condiciones originalmente pactadas de los créditos sin que estos ajustes sean considerados como una reestructuración, siempre y cuando durante los últimos 6 meses el crédito no haya alcanzado una mora mayor a 60 días para microcrédito y consumo; y 90 días para comercial y vivienda, con el fin de permitirle al deudor la atención adecuada de su obligación ante el potencial o real deterioro de su capacidad de pago. Esta herramienta no genera reporte ante centrales de riesgo.

Por el contario, debe considerarse reestructurado, de acuerdo con el subnumeral 2.3.2.2.1. de la Parte II del Capítulo XXXI de la Circular Básica Contable y Financiera, un crédito modificado que entre en mora de 30 o más días. Lo cual sí genera reporte ante centrales de riesgo.

Recordemos que ya la banca celebraba,   las medidas particulares, tomadas por la SFC, que fueron propuestas por las entidades crediticias, por su capacidad de  aliviar la situación financiera de los hogares, particularmente de los más vulnerables.

Nadie mejor que Asobancaria para explicarlas: "Por un lado, la de ampliar, provisionalmente por un año, el límite de 30 días de mora a 60 días de mora para que un crédito modificado sea reestructurado. Esto permitirá una ventana mayor para que el consumidor pueda normalizar su situación crediticia ante una afectación en la capacidad de pago. Segundo, Coadyuvar en la divulgación de la Circular Externa 026 de 2017, que contiene las disposiciones sobre modificación y reestructuración de créditos, para que los clientes y las mismas entidades comprendan a cabalidad las medidas con las que cuenta el sistema financiero para brindar alternativas de pago oportunas. Esto teniendo en cuenta que dicha divulgación funciono muy bien con los hogares y empresas en el periodo de la Pandemia".

EL PAPEL DE LAS REPARADORAS DE PAGO  - ¿Favorecen o entorpecen? 

Llamó bastante la atención el llamado que hizo la Asobancaria a la Superintendencia de Sociedades y la Superintendencia de Industria y Comercio para lograr la expedición de la normativa que asigne la supervisión a empresas “reparadoras de pago”, con el fin de proteger a los consumidores gestionados por estas, pues no están bajo vigilancia de la SFC.

Frente a estos actores, muchos se preguntan cuál es el verdadero papel de esta entidades que se definen ellas mismas, como un eslabón que ayuda en la recuperación de la cartera, facilitando al deudor ponerse al día con la entidad financiera, a través de mecanismos que los bancos no ofrecen.   Por el contario, varios Gerentes de Cobranza de los bancos las identifican como un dolor de cabeza, que se interpone entra el banco y el deudor, solo con el fin de hacer negocio con las dificultades de deudores que no cuentan con la información adecuada. Opinan que alejan al deudor de la solución, les generan gastos adicionales y les ofrecen mecanismos que el banco directamente les puede aplicar y de manera más eficiente. 

Según expone Asobancaria: "ofrecen soluciones de pago “extraoportuno” de obligaciones crediticias vencidas, no otorgan información completa a los consumidores y pueden estar induciéndolos a decisiones equivocadas que generan reportes negativos en su historial crediticio. Es muy importante que se trabaje en la expedición de normativa que asigne la supervisión de este tipo de entidades, con el fin de proteger a los consumidores gestionados por estas".  

En su defensa las reparadoras de crédito insisten que los bancos aún no han entendido su valor y desconocen gran parte de las soluciones que ofrecen por ejemplo como la opción de "ahorrar".  Argumentan que los bancos las han evaluado, por casos puntuales, reclamos descontextualizados por la prensa, que no representan la realidad y el acontecer del total de clientes que si le han logrado pagar al banco gracias a su asesoría. 

Ojo pero no nos confundamos:  Por el contrario, existen otros actores de este especializado ecosistema de la cartera en "default" o en mora avanzada, que son las empresas de compra de cartera vencida o colectoras, que se han convertido en el verdadero eslabón del cierre del ciclo de riesgo y son hoy grandes aliados de todo tipo de bancos y entidades crediticias, y son las que compran directamente a los bancos grandes portafolios de cartera mal llamada "castigada" que se encuentra provisionada al 100%.  En este rubro encontramos empresarios de reconocimiento y trayectoria nacional y Regional como ARS, QNT, Refinancia, y empresas como VDA que se especializan en la cartera empresarial y empresarios de las grandes ligas de la cobranza y el BPO como AECSA.    

Luego se de ser adquiridos por las colectoras directamente al banco, estos deudores vencidos son sujetos de soluciones de refinanciación hechas a la medida, logrando que mejores su situación de riesgo y puedan ser sujetos de nuevos crédito.

MIENTRAS CRECE EL DETERIORO DE CARTERA, LAS UTILIDADES CAEN 

Al cierre del semestre las utilidades del sistema financiero reflejan una caída del 47,1% frente al cierre semestral del año 2022 cuando alcanzaron los $9,02 billones frente a los $4,77 billones de este primer semestre. 

RIESGOS CIBERNETICOS 

Resalta la SFC el riesgo de amenazas cibernéticas, que se han materializado ya en varias oportunidades en Colombia con ataques de gran alcance y afectación, que además generan graves consecuencias a nivel de riesgo operacional y riesgo  reputacional, sin mencionar el  daño que genera en la confianza de los consumidores.

EL RIESGO DE LIQUIDEZ EN LA MIRA DE LAS ENTIDADES BANCARIAS  

En uno de los recientes informes de Banca y Economía que produce semanalmente Asobancaria,  el gremio resaltaba la necesidad  de preservar la liquidez en la economía. AL respecto explicaba el gremio: "La brecha entre el Indicador Bancario de Referencia (IBR) overnight y la Tasa de Política Monetaria, que da cuenta del nivel de liquidez en el mercado, se ha mantenido acotada y cercana a cero gracias a las medidas tomadas por el BR para hacer frente a las presiones de liquidez.  Persisten, sin embargo, algunas presiones de liquidez en el mercado. Uno de los factores que continúa generando dichas presiones ha sido el manejo de los recursos del Gobierno que se encuentran en la Cuenta de Depósitos del BR. Al respecto, los saldos diarios en esta se han incrementado debido al aumento de los ingresos tributarios, la menor ejecución del presupuesto excluyendo el servicio de la deuda frente al promedio histórico de 2016-2022 y los montos del Fondo Nacional de Pensiones de las Entidades Territoriales (FONPET). El cumplimiento de las mayores exigencias del CFEN también ha presionado al alza las tasas de interés de captación de los depósitos a plazo, en especial los de mayor duración. Pese a que la implementación del CFEN ya es completa, desde hace unos meses se han evidenciado nuevos aumentos en las tasas de captación y presiones de liquidez por cuenta de vencimientos de CDT y aumentos nominales de la cartera de crédito".

Al respecto Jonatan Malagón Presidente de Asobancaria, hace un llamado respecto a que es "pertinente adoptar una serie de medidas para garantizar una liquidez acorde con las necesidades de la economía". Dentro estas propuestas para irrigar liquidez ,Malagón ha destacado las siguientes: permitir a extranjeros comprar CDT en el mercado primario, compra de dólares en el mercado spot acompañado de venta en el mercado forward, ofrecer repos garantizados con deuda privada (CDT) o cartera a plazos de entre 6 y 18 meses y  reducir el encaje bancario.