Yunus: un máximo exponente de las finanzas >b> beneficio

“Vivimos en tiempos emocionantes, una era en la que el mundo ya está preparado para un maravilloso y positivo cambio que los Negocios Sociales pueden crear”, de esta manera el profesor Muhammad Yunus, reconocido como el padre del microcrédito, nos invita a unir esfuerzos para crear conexiones de valor entre la generación de riqueza, el impacto social y la sostenibilidad financiera en toda actividad productiva.

Muhammad Yunus es sin duda un pionero de los Negocios Sociales, fundador del Grameen Bank y de más de 50 empresas en Bangladesh y alrededor del mundo. Por su constante innovación y emprendimiento, en 2006, el profesor Yunus y el Grameen Bank recibieron conjuntamente el Premio Nobel de la Paz. Por su parte, la revista Fortune lo nombró en marzo de 2012 como “uno de 12 emprendedores más grandes de nuestro tiempo.

Todo comenzó un día en el que Yunus, tras una gran hambruna que asoló el país en 1974, decidió ayudar a unos campesinos con grandes dificultades que vivían cerca de la Universidad de Chittagong en Bangladesh. Elaboró una lista de 42 personas en grandes dificultades, en total, debían menos de 27 dólares. Cada uno de ellos recibió la cantidad que adeudaba sin otra condición que la de concentrarse en su trabajo y la de devolver el dinero cuando pudiera. Hoy el Grameen Bank presta más de US$2.500 millones a 9 millones de mujeres pobres, y el 98% de ellas cumplen con el pago su deuda.  

El profesor Yunus, es un convencido que el pilar de una paz sostenible, es crear las condiciones para que las poblaciones cuenten con un trabajo decente y unas condiciones de vida dignas, por ello viene trabajando en Colombia desde el 2012, primero con programas de microfinanzas en el departamento de Caldas y ahora a través de su organización Yunus Negocios Sociales que ya da cuenta de 50 negocios apoyados e inversiones por unos US$2 millones, que han impactado a 300.000 beneficiarios y han creado más de 1.000 empleos. Además de Colombia, esta iniciativa se desarrolla también en India, Uganda, Túnez, Albania, Haití y Brasil.

Uno de sus programas más exitosos es Campo Vivo en un joint venture con la multinacional de alimentos McCain Foods, el que ha logrado incrementar los ingresos para cientos de agricultores de papa. El programa inició con 25 familias desfavorecidas para trabajar unas 37,5 hectáreas en el municipio de Une (Cundinamarca).

 'Campo Vivo’, que funciona como un centro de excelencia, pretende mejorar la calidad de vida de familias colombianas dedicadas al cultivo que viven en condiciones de pobreza por falta de recursos para conseguir tierras productivas, o que han sido desplazadas a causa del conflicto armado. Este centro de excelencia, provee educación y asesoramiento a los agricultores de papa con el fin de que puedan mejorar la producción y logren generar un negocio rentable, que mejore su calidad de vida y la de su comunidad.

 Yunus es un convencido que la frustración que genera la pobreza no puede sostener la paz en ninguna sociedad: “Para construir una paz estable hay que encontrar la forma de proveer oportunidades a la gente para tener vidas decentes. En este sentido, los negocios sociales juegan un rol fundamental para asegurar la paz, al proporcionar oportunidades económicas y acceso a educación, una vivienda digna o salud para los pobres. Nada es capaz de prevenir tanto la violencia como un trabajo decente y unas buenas condiciones de vida”.

Yunus insiste en la importancia de romper el círculo vicioso de la pobreza “los bancos prestan dinero a la gente que actualmente ya lo tiene. Los bancos deben servir a la gente y ser el apoyo para que los emprendedores puedan crear trabajos y resolver problemas”. Insiste que si el microcrédito se hace bien, permite a la gente con muy bajos recursos salir de la pobreza, que en su visión y experiencia todo el mundo nace emprendedor, es un problema de falta de oportunidades.