Empresas verdes en Colombia y la bioeconomía un segmento de gran potencial para la profundización crediticia

Con una cifra que ronda los 5.000 empleos directos, una facturación alrededor de 90.000 millones de pesos, comienzan a hacerse sentir los negocios verdes en Colombia a través de 800 empresas a nivel nacional plenamente identificadas y 350 de ellas ya verificadas; por que según lo define el Plan Nacional de Negocios Verdes cumplen con las siguientes condiciones: “Tener un impacto ambiental positivo, que no tenga una obsolescencia programada, que use desechos de reciclaje, que sustituya sustancias o materiales peligrosos, el uso sostenible de recursos como el agua y la energía en la producción, una filosofía de responsabilidad social en cuanto al pago de salarios justos, tener en cuenta la cadena de valor hacia el proveedor de los insumos, la comunicabilidad de los atributos sociales o ambientales y, por supuesto, que generen un dividendo económico”.
Según el nivel de cumplimiento de un poco más de 42 indicadores, los “negocios verdes” se califican en tres niveles: ‘negocio verde satisfactorio’, ‘negocio verde avanzado’, o ‘negocio verde ideal’.
Los sectores que impulsan el llamado ‘Crecimiento Verde’ van desde energías renovables, agricultura sostenible no maderera, eco-turismo, y mercado voluntario de carbono, y hasta el aprovechamiento genético de la biodiversidad. En un sentido más amplio, la Cepal habla de la bioeconomía, término que conecta fuerzas como la bioenergía, la biotecnología, la biomasa y los bioinsumos, con las cadenas de valor industrial para maximizar la generación de flujos de economía circular; por su parte Janine Benyus, co-fundadora del Biomimicry Institute3 equipara los Negocios Verdes con la “Innovación sostenible inspirada por la naturaleza”.
De manera alineada con esta nueva dimensión que aborda la Cepal, Gunter Pauli, economista belga, fundador de Ecover, empresa ecológica pionera considerada modelo mundial, ha incorporado al nuevo ordenamiento de los Negocios Verdes, el concepto de “Economía Azul”, que va más allá de la preservación, para focalizarse en la regeneración a través de la aplicación de los principios de la física, química y biología, tal como lo hacen los ecosistemas naturales para regenerarse. Gunter Pauli explica que “las industrias basadas en la economía azul […] se inspiran en la manera en que la naturaleza hace uso de la física y la bioquímica para construir totalidades que funcionan armoniosamente, canalizando la abundancia, transformando sin esfuerzo y reciclando eficientemente sin desechos ni pérdidas de energía”.
Gustavo Manrique, presidente de los Premios Latinoamérica Verde resalta: “el 85% de los proyectos socio ambientales fracasan en los primeros años por falta de difusión, planeación o acceso a financiamiento. Solo el 5% sobreviven más allá de 3 años”.
Con un crecimiento superior al 42% en el último año y unas necesidades financiamiento insatisfechas, los Negocios Verdes, sin duda estarán en el foco de las entidades crediticias en 2018, como un segmento de alto potencial para profundizar con productos financieros especializados que permitan apalancar el crecimiento del sector, su competitividad, y su avanzar hacia el siguiente nivel: incorporase a las Cadenas de Valor de la Bioeconomía.
Colombia se destaca en los Premios Latinoamérica Verde
Los Premios Latinoamérica Verde, los más importantes en la Región, generadores de alianzas económicas y sociales, reconocen cada año las 500 mejores iniciativas socioambientales, en 10 categorías que están alineadas con los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS). Estas son: Agua, Bosques y Flora, Biodiversidad y Fauna, Desarrollo Humano, Inclusión Social y Reducción de Desigualdad, Energía, Finanzas Sostenibles, Gestión Urbana, Manejo de Residuos Sólidos, Océanos y Producción y Consumo Responsable.
Destaca la entidad organizadora de los premios: “Latinoamérica, nuestra casa común, cuenta con el 23% de bosques tropicales, el 31% de los recursos hídricos y el 70% de la biodiversidad del planeta. Sin embargo, es la región con más crecimiento urbano donde el 80% de la población vive en ciudades; causando presión sobre el ambiente y por eso enfrenta sobrepoblación, deforestación, pérdida de biodiversidad, contaminación de agua”.
En su pasada edición en Guayaquil (Ecuador 2017), Colombia se destacó por el número de casos inscritos y por ser ganadora en dos categorías:
- Categoría Agua: CENAGRAP, Ecuador
- Categoría Biodiversidad y Fauna: Conservación de tortugas, México
- Categoría Bosque y Flora: Gastronomía y Conservación, Perú
- Categoría Desarrollo Humano: Papel Amigo de la Tierra, Chile
- Categoría Energía: Barefoot College, Colombia
- Categoría Finanzas Sostenibles: Bancolombia, Colombia
- Categoría Gestión Urbana: Una Escuela Sostenible, Uruguay
- Categoría Manejo de Residuos Sólidos: Mamut, Bolivia
- Categoría Océanos: Mirim Costeiro, Brasil
- Categoría Producción y Consumo: Evea Ecofashion, Perú
El proyecto"BONO VERDE - BANCOLOMBIA", postulado en la categoría Finanzas Sostenibles, se constituyó en la primera emisión de Bonos Verdes realizada por una entidad financiera privada en Latinoamérica para financiar proyectos ambientales. El alcance de la emisión incluyó el financiamiento de proyectos que ayudan a combatir el cambio climático, como son las energías renovables y la construcción sostenible.
Los recursos procedentes de la emisión fueron utilizados como una de las fuentes de fondeo para la línea verde. El 67% de los proyectos que hacen parte del bono corresponden a pequeñas centrales hidroeléctricas que funcionan a filo de agua sin presa y el 33% restante corresponde a proyectos de construcción sostenible que cuentan con certificación LEED.